Alfredo nace en Montevideo en 1968, años muy locos en Uruguay, cerca de estallar la dictadura, cursa sus estudios al principio en la Facultad de Arquitectura y luego en Bellas Artes. También estudió cine en la escuela de Cinemateca a temprana edad, ya que deja el liceo para ello. Aunque indago en varias carreras todas del ámbito artístico, no finalizó ninguna. Durante su juventud vivió mucho tiempo en Buenos Aires y en San Pablo, sin embargo hoy en día vive en Montevideo.
Ghierra nos presentó la temática de sustentabilidad mediante dos proyectos, primero una campaña que largo en el año 2010 llamada Ghierra intendente y luego su lucha para preservar el patrimonio del uruguay.
El proyecto de intendente, parte del descontento que le generaban las propuestas presidenciales de ese año de elecciones, y donde le surge la urgencia de hacer algo por su país, algo que nadie estaba haciendo, meterle un pienso creativo a una campaña y propuesta electoral.
Es por eso que en este proyecto no ejerce como artista ni diseñador sino que como mediador de todos los artistas , diseñadores, arquitectos, entre muchos más, invitados a este proyecto que se conforma como Ghierra Intendente.
Este proyecto planteaba la idea de formar una campaña electoral, que no iba a estar sujeta a votos, sin embargo iba a estar recreada con la misma profesionalidad que una campaña real, con la misma calidad de contenido y de propuestas, sin embargo con la ventaja de que no requerían de fondos para hacer sus proyectos y podían meterle la cantidad de creatividad que se les ocurriese para hacer la mejor propuesta posible.
Estos artistas invitados plantean medidas para modificar e innovar espacios públicos de la ciudad de Montevideo, y fueron propuestas tan increíbles que captaron la atención de los medios, e incluso llegaron a las mesas de votación aunque no fuese válido votar a Ghierra.
Entre las propuestas estaban los bancos Luciérnaga, colocados por toda la rambla que iluminaban y emitían wifi a quienes se sentasen. También se destacaba la propuesta Lindolfo, el parque sobre el puerto de Montevideo que iba a atraer a todos los turistas.
Por otro lado Ghierra también nos planteó su proyecto La Ciudad Abandonada, que trata su preocupación por el patrimonio histórico, e incentiva a que los propietarios de dichas viviendas le otorguen los permisos al gobierno para poder mantenerlas y que no se demuelan.
Nos mostró una serie de lugares que se han demolido en Uruguay, con una magnificencia que solo tenían las arquitecturas clásicas de la antigüedad, y las cuales hoy sería imposible replicar, significando no solo una pérdida gigante a nivel arquitectónico sino que también a nivel cultural para nuestro país.
Esta charla dio pie a mirar con ojos críticos nuestra ciudad, ya que tomamos por sentado lo que tenemos todos los días pero realmente poseemos un patrimonio impresionante que no se le está sacando provecho y se está dejando arruinar por los años o más triste, se esta destruyendo.
Entendamos que lo nuevo siempre no es lo mejor y que parte de renovarse es renovar el pasado e indagar en este para así prosperar en el futuro. No podemos seguir creando una nueva identidad cuando estamos destruyendo la que ya tenemos.
Por acá les dejo el Facebook de Basta de Demoler, para que se mantengan al tanto de los lugares que se plantean demoler y así tratar de evitarlo:
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